3.1 Consideraciones Generales
Es a partir de fines de la década del 60 cuando los experimentadores californianos, en EE.UU., comienzan a incursionar en diferentes formas de suprimir la estimulación sensorial, recurriendo a tanques de flotación para privar a la conciencia de su actividad de estructuración de los impulsos provenientes de los sentidos externos.
La privación sensorial consiste en la restricción total o parcial de estímulos de uno o más de los sentidos. Instrumentos simples como vendajes en los ojos o capuchas y orejeras de protección acústica pueden bloquear la visión y la audición respectivamente, mientras instrumentos más complejos pueden también bloquear el sentido del olfato, tacto, gusto, la termo-recepción (percepción de la temperatura) y el registro de la “gravedad”.
La privación sensorial ha sido usada en varios experimentos psicológicos usando un tanque de aislamiento sensorial, también conocido como cámara de silencio o piscina de flotación. Es un tanque lleno de agua con una banda que permite sostener el cuerpo en flotación. Actualmente se ha masificado bastante ya que ofrece distintos beneficios tanto físicos como mentales. Se pierde la noción del peso del cuerpo. La temperatura del agua se mantiene entre 36.2 y 36.7°C, de esta forma no se siente ni frío ni calor. La persona que entra en el tanque tiene la sensación que su cuerpo se funde con el agua.
En nuestro caso, utilizamos las ventajas de relajación y concentración que una cámara tiene para favorecer y acelerar el trabajo de Ascesis. Más que buscar otros resultados, nos ofrece la posibilidad de reducir casi totalmente la actividad sensorial externa, para concentrar la mente en la dirección que nos interesa, desencadenando mecanismos de acceso a Lo Profundo.
Lo que nosotros buscamos en estos trabajos con CSS es avanzar en lo sustancial de la Ascesis y de la experiencia interna.
El trabajo en CSS no es racional, es desde un nivel de trance donde no hay mucho raciocinio. No se trata sólo de semisueño, se trata de romper un umbral y entrar por abajo de la racionalidad. La dirección es el vacío, se trata de no hacer nada. En principio hay que esperar, en muchos casos se necesitan hasta 40 minutos para “entrar”, así que es necesario no desesperarse y aprovechar los primeros tiempos para relajarse. En estos momentos iniciales también se puede explorar el mantener la atención sobre la respiración y otros recursos que aceleran lo que la cámara tiende a producir por sí sola. A lo largo de las sesiones se va produciendo una acumulación de impulsos que de repente permiten captar y estructurar registros. Por esta razón, el esquema de trabajo apunta a una saturación, cosa que además permite desestructurar la forma mental y la actitud de base (que viene también del Paisaje de Formación17con la cual uno se enfrenta a estos trabajos.
Antes de ingresar a la CSS se recomienda tomarse un tiempo (de alrededor de una hora) para meditar sobre el Propósito del trabajo a realizar, de manera que al comienzo de cada sesión se formula el interés específico que tendrá la sesión. Conviene que la enunciación sea “sentida”, con encaje, conectándose con lo que se va hacer, como una pequeña anticipación de lo que viene, evocando registros. No es algo que se deba extender mucho, es la formulación de lo que uno se propone hacer, pero vale la pena que se haga con sentimiento.
3.2 Marcar registros como huellas
Vemos lo que pasa con un deportista cuando se entrena: al atleta cuando se entrena no le interesa mucho la teoría sobre los músculos ni el sistema nervioso, en cambio tiene que tomar una pelota y tirarla dentro de un cesto (en el baloncesto), va repitiendo y repitiendo y va tratando de grabar algo internamente, procede por aciertos y errores. Cuando acierta, repite y repite, para grabar una memoria. Esa memoria tiene una parte bien física, el cuerpo en movimiento tiene que grabar un tipo de memoria kinestésica, los movimientos, y también el estado emocional y la concentración mental. El deportista trata de grabarlo de esta forma, puede haber un poco de teoría, pero el entrenamiento pasa por repeticiones y marcar huellas, porque permiten volver a la misma experiencia. Se trata de construir una suerte de reflejo condicionado, un tipo de acción mecánica pre-construida.
Entonces, si aparece la imagen de una estrella la huella que tratamos de marcar es el registro, el impulso y no tenemos que entender de dónde viene: si viene del espacio interno, si es una glándula o es algo más fisiológico. Nos interesa el registro, captar la señal y que esta señal deje una marca, entonces nos preocupamos de la reiteración e intensidad. Cuando estamos preocupados de producir registros, no nos preocupamos de entender.
En principio en la CSS pasan cosas que no se entienden, pasan cosas que no se captan, que la conciencia no logra memorizar. Por esto es importante la repetición, de manera de ir afinando una técnica para la realización de estas experiencias.
3.3 Los registros
Definiendo lo que llamamos registros en general, no sólo en CSS, podemos decir de forma esquemática: se trata de sensaciones, las que se organizan en percepciones y que, al integrarse en la memoria, se estructuran.
Hay registros que se mueven en la franja de lo subliminal, que su carga no llega a mover suficientemente los sentidos para que estos los organicen. En este caso será necesaria la reiteración del estímulo para que la sensación sea estructurada por el sentido, aún antes de que llegue a la conciencia.
Es importante también una predisposición energética, un plus energético que puede elevar el tono del sentido para que sea más apto a captar el estímulo. Cuando estamos relajados, reposados y concentrados en la tarea, los sentidos trabajan mejor.
Por último, es posible un adiestramiento fino de los sentidos, ganando experiencia en trabajar con estas franjas. Tener conocimiento de prácticas de relajación, de meditación, de yoga, familiarizarse con las sensaciones intra-corpóreas por medio de varias prácticas, va en esta dirección.
Una vez que la percepción empieza su trabajo sobre los impulsos que reiteradamente se presentan, se empieza a estructurar la memoria del registro, memoria que empieza en el sentido que capta la señal. Esta estructuración es un acomodamiento de la percepción (sensación + tono del sentido) hacia la memoria, donde la percepción queda guardada, formalizándose en imágenes que codifican el registro. El rastreo de tales imágenes codificadoras de experiencias no habituales no siempre es simple, a veces quedan ocultas a la mirada vigílica para no perturbar la normal operatividad del psiquismo. Estos restos suelen rescatarse gracias a la imaginería del sueño o del semisueño, así como hay actividades más propicias para que se manifiesten (actividad artísticas y algunos oficios). En este trabajo nos interesa el rescate de tales restos para profundizar la experiencia y no para interpretarla psicológicamente.
Todo el trabajo en CSS tiene como “modus operandi” el “dejarse ir”, si podemos reconocer algunos “restos”, serán las sensaciones que los acompañan las que queremos amplificar y no tanto un trabajo interpretativo sobre la imaginería.
3.4 La memorización de los impulsos
¿En qué situaciones la memoria optimiza su funcionamiento? Es por la reiteración del estímulo, por la intensidad del estímulo y por el estado energético general en que se encuentra todo el psiquismo y la memoria en particular, que tiene que grabar el estímulo. Son tres condiciones básicas que tomamos prestadas de la psicología.
Lo que queremos de estas señales que nos llegan de Lo Profundo, es la reiteración de las señales, elevar su intensidad y que cuando lleguemos al punto de encontrarnos con ellas tengamos el máximo de energía posible para poderlas captar. Todo esto es un conjunto al que hemos llamado “restología”. No nos conviene que cuando captemos estas señales nos dejemos llevar por muchas cadenas asociativas, con divagaciones libres, porque pronto la memoria normalizará esta señal haciéndola desaparecer o restándole intensidad. El tema con las divagaciones es que finalmente la memoria en sus cadenas asociativas busca ir “normalizando” todos los contenidos. Rescatamos estímulos que vienen de lugares lejanos y tendemos a normalizarlos, tratando de meterlos en cadenas asociativas, en trenes de imágenes. Al hacer eso se les está quitando la parte más interesante, ya que el impulso original queda mezclado entre muchas cosas que aparecen, tanto que al final no sabemos si entre todas estas imágenes hubo algo de interés. Hasta lo olvidamos. Es muy llamativo que cantidad de experiencias interesantes que suceden en CSS, se olviden a los pocos minutos (por ello la necesidad que estas queden registradas por Control y contar con audios, filmaciones y notas post experiencia).
Nuestro proceder es por reiteraciones, buscando mayor intensidad de los impulsos, de los registros: si aparece una voz, está bien que se diga algo…, pero vamos a los registros, a lo que se siente con esto, a identificar los impulsos, sus significados, lo que genera, lo que pasa con la cenestesia, dónde resuena, etc..
Estamos hablando de formas de proceder en el trabajo en CSS. Entonces no vamos hacer un trabajo de interpretación psicológica, más bien estamos en una ruta mística. Por tanto necesitamos del trance, donde el sistema de representación está alterado. La psicología, incluso la psicología más avanzada, enfrenta el tema del trance en términos teóricos, y no nos dice mucho respecto de la experiencia y cómo lograrla, porque en el trance nos encontramos con cosas bastante caóticas, desordenadas, irracionales y alucinatorias, que para la psicología son errores de funcionamiento.
La forma de proceder para nosotros será más descriptiva, sobre todo tratando de armar procedimientos. Todo trabajo místico interesante empieza si hay trance, si no hay trance en realidad estamos todavía en lo psicológico. Para nosotros es muy importante romper el umbral y entrar. Lograr entrar en el trance y poder profundizar en una dirección interesante, que no es tarea fácil.
3.5 Las representaciones en el trabajo de CSS
Profundicemos sobre las imágenes que van apareciendo en Cámara, donde todo el sistema de representación está sujeto a las alteraciones de este nivel de trabajo, con alucinaciones, saltos caóticos, descontrol, hasta perder el punto de mira y donde se producen deformaciones en el espacio de representación y se rompen los mecanismos habituales con los que trabaja el psiquismo.
Para entender lo que pasa en la desestructuración del Yo y sus cercanías vale la pena repasar los capítulos de “Apuntes de psicología” (Silo, 2006) referidos a: errores de los aparatos (sentidos, memoria, conciencia); el sistema de representación en los estados alterados de conciencia; los errores de interregulación del psiquismo; y la conciencia perturbada. Nuestra experiencia muestra que no nos conviene meternos con muchas imágenes, porque hay un problema con las traducciones y alegorizaciones de los registros.
Sabemos que en la CSS las imágenes surgen como traducción de algún impulso que viene del intracuerpo, de algún espacio interno. Lo que queremos es describir estos registros, tratar de describir el registro sin codificarlo demasiado a través del sistema de imágenes. Está claro que en las descripciones vamos usando alegorías, vamos usando metáforas, surgen imágenes que en sí mismas son traducciones y deformaciones. Por esto tratamos de no darle importancia a las imágenes, quedamos en libertad, como dice en La Mirada Interna en el capítulo de La Guía del Camino Interno (Silo, 1989): Rechaza el apego a los recuerdos, queda en libertad interior, con indiferencia hacia el ensueño del paisaje, con resolución en el ascenso…
Hacemos un cierto tipo de vacío a las imágenes, a las representaciones que aparecen en cadenas, tratando de describir sensaciones, registros. Está claro que tampoco queremos inhibir las imágenes si aparecen, pero tratamos de no seguir las cadenas asociativas, porque en esto se mete mucho la memoria. Por ejemplo: puede aparecer una luz que se me aparece como una estrella, entonces tomo una astronave y me voy por una cadena asociativa en la que soy el protagonista de una película, Luke Sky Walker, estoy en una película y así me voy corriendo, entrando muchos contenidos de mi biografía y de mi memoria que se mezclan con las sensaciones de los impulsos originarios, entonces todo se complica. Nos quedaremos con un trabajo difícil de descifrar, donde todo está confundido. De modo que cuando aparece la estrella, no intento tomar una astronave para ir allá… pero me quedo con la sensación que me daba la estrella, me quedo más cerca del impulso original.
No conviene darle importancia a las cadenas asociativas, sino atender a lo mínimo como para describir. Quedarse con las sensaciones, describiendo el impulso que estoy captando, quedarse con eso. En el ejemplo anterior, es entonces una luz, tiene un cierto tipo de color, la voy describiendo, porque ese es un impulso que me interesa relevar, amplificar, intensificar, grabarlo bien. Me meto entonces con esta luz, con la sensación que me da, atendiendo a si es una cosa buena, si es una cosa interesante, si me produce un cierto tipo de emoción, si siento resonancias en el pecho y/o en la cabeza, y así siguiendo.
Esta forma de trabajo es la recomendada, que utiliza ciertamente imágenes y metáforas, pero sin caer en la trampa de construir especies de mitos, leyendas y cuentos, no porque esto sea malo, sino porque son traducciones que nos alejan del registro. Buscamos una dirección más mística. No es nuestro trabajo en CSS construir leyendas, mitos o paisajes. Estas imágenes son parte de la cosa, son traducciones necesarias, pero para nosotros es más importante lo que se refiere a la experiencia más pura, a los registros, queremos construir escalones para volver a ellos, dejar señales, que son registros grabados.
Muchas imágenes no sirven para luego poder volver al registro, lo que más sirve para volver allí es la intensidad que toma el registro y las descripciones para darle lugar en la memoria. Esto tiene que ver con el tipo de construcción que estamos haciendo. Nuestro “paradigma” es sin imágenes, es como que el paraíso al que nos referimos está vacío, entonces no hay ninguna imagen, no hay nada, es más bien un estado. Tratamos que las traducciones que aparezcan sean las mínimas y los registros fuertes, para volver allí. De no ser así, nos quedamos sin nada. Quedarnos solo con traducciones no nos sirve. No inhibir pero tampoco meterse demasiado con las imágenes, vamos a los registros puros, sensaciones puras, entonces más que otra cosa es como un estado, lo que buscamos es un estado que tratamos de describir, y en estas descripciones habrá algunas imágenes, pero va más por el lado de la descripción de un estado, preferimos lo descriptivo, no lo interpretativo. El tema de traducciones, alegorías y todo eso, sirve en la medida que uno se pueda quedar con el registro puro.
3.6 La dirección del trabajo de Ascesis como conjunto y La Escuela
Interesan procedimientos ínter-subjetivos, en el sentido que no podemos confiar en la capacidad del individuo, ni considerar que nuestros trabajos tengan como finalidad lo individual. La CSS de por sí produce un tipo de experiencia que es la misma para todos. Es una experiencia que comienza con la privación sensorial, donde todos los seres humanos que utilizan este procedimiento tienen registros similares.
Tenemos el mismo cuerpo, el mismo espacio interno, los mismos órganos, el mismo psiquismo, todos podemos llegar a lo mismo y nos interesa este tipo de emplazamiento. Procedimientos “objetivos” comprobados en conjunto, que se puedan compartir y reproducir. Nos interesan estas experiencias que no se apoyan en la capacidad subjetiva de un sujeto que supuestamente tiene capacidades extraordinarias, que tuvo una buena infancia o es un talento.
No hacemos pie en la personalidad, lo que nos interesa es un tipo de procedimiento que sea para todos, que se pueda comunicar, experimentar en conjuntos. Además todos nuestros trabajos son para proyectarlos y ponerlos a disposición de otros. El cambio interno tiene que ir de la mano con el cambio social y cultural. No nos interesa acrecentar al Yo, el prestigio o el culto de la personalidad. Acá hay una concepción sin personalismos, un propósito propio de una Ascesis. Tampoco se trata de que uno se sienta mejor que los otros. Interesan los conjuntos, se trabaja en conjuntos. Las experiencias y procedimientos que no se puedan socializar no nos interesan.
La Escuela es un ámbito mental y material para que estos trabajos se desarrollen, de conjuntos en conjuntos, de generación en generación.
El desarrollo de la Escuela surge desde la necesidad intrínseca de la misma Experiencia Trascendental de transmitirse de unos a otros. Esta experiencia es justamente lo que aparece con relativa sencillez en la CSS, pero su fijación y su desarrollo es bastante mas complejo y depende del ámbito en que cae esta experiencia extraordinaria
¿Cuál es el sentido entonces de estos trabajos con apoyo de CSS? Es aprender y desarrollar una forma colectiva de llegar a la Experiencia Trascendental, para a su vez transmitirla, de modo que sea fundamento de futuros trabajos e inspiración en la dirección de Humanizar la Tierra.
Esta experiencia no sólo tiene que inspirar y dar lugar a otras producciones, artísticas, literarias, desarrollos sociales, científicos, etc., sino debe poder replicarse en otros. Interesa que otros puedan abrir sus ojos a estas realidades interiores, tocarlas con sus propias manos.
Así que el sentido es que estas experiencias no sólo queden en La Escuela, sino que se reflejen en producciones bibliográficas, en investigaciones de campo, testimonios, etc., y se traduzcan también en respuestas y actividades para transformar el mundo. Pero sobre todo es que otros puedan acceder a “la fuente”, a Lo Profundo, y puedan a su manera inspirarse, traducir, producir, actuar. Esto es lo que llamamos La Escuela, donde encontramos los trabajos más sofisticados y complejos para conectar con Lo Profundo.
La Escuela es un complejo de herramientas materiales e inmateriales que sirven para que el ser humano se conecte con “la fuente”. Es el ámbito colectivo que puede desarrollarse en términos horizontales, sin personalismos, sin autoridades.
La Ascesis es un trabajo organizado, es un esfuerzo coordinado colectivamente. Muchos Maestros, como Buda, Platón, Pitágoras, Silo y otros (Schuré, 1889) no han desarrollado esto para el sólo beneficio de individuos, sino que para encauzar el desarrollo humano en sentido evolutivo.
Para nosotros, el ámbito en que se desarrolla una Ascesis es La Escuela. El sólo esfuerzo personal no parece suficiente para armar una Ascesis, esta depende mucho de los ámbitos en que se participe y de los muchos aportes que son parte de la historia humana. El cambio interno se da al mismo tiempo que la transformación del mundo, son dos aspectos que se alimentan recíprocamente.
Esta visión en estructura ve entonces a la Ascesis y las prácticas apoyadas en CSS, como un proceso colectivo donde esa transformación personal y social no dependen simplemente del esfuerzo individual, sino que están condicionadas por el ámbito mayor, vale decir, dependen de la retroalimentación que se produce con la acción en el mundo.
En la historia se ha manifestado La Escuela cuando se ha develado la Experiencia Trascendental y se han podido configurar formas colectivas adecuadas para su trasmisión, merced a desarrollos de prácticas en conjuntos humanos. A su vez es posible afirmar que La Escuela surge en momentos de dificultad del proceso humano, en momentos en que este enfrenta riesgos importantes de involución, por lo que siempre tiene un carácter revolucionario, ya que formula y propone nuevos paradigmas que recuperen una dirección acorde con la evolución de la vida.
En síntesis se puede decir que la metodología propuesta en este escrito sobre una Ascesis con apoyo de Cámara de Supresión Sensorial, aporta a la búsqueda de la Experiencia Trascendental, a una nueva actitud frente a la vida y a la comprensión de la función de la Escuela en la historia humana.